Los mercados se encaminan hacia lo desconocido.
Además donde todo es posible en este momento. Así a ojo, más del 50% de las empresas están en riesgo real de desaparición acelerada en todas las economías desarrolladas.
Las inversiones en tecnología hacen tambalear cualquier sector productivo ya que sirve de competidor disruptivo. No canibaliza un sector, permite que otros puedan hacer lo mismo de manera mucho más rentable, es decir, su existencia está en riesgo en un mundo ya global.
Comenté que venía la inflación galopante y que ojalá me equivocara y, por ahora sólo se ha manifestado en subidas recientes. Una alteración de la producción y las consecuencias de la COVID dejan los artificios contables en desánimo y dificultad. No es fácil vender más, no es fácil mejorar los márgenes, no es fácil crecer y todo esto no lo es para la sociedad del siglo XX. La tecnología consigue competidores que no ven venir y que simplemente asfixian realidades empresariales como nada.
Hay suficientes factores de excepcional repercusión que plantean un escenario difícil de calibrar o mejor dicho, dejan la mayor incertidumbre jamás conocida en todo orden y es que la aceleración sobre la información, su comunicación, tratamiento y aplicaciones es simplemente difícil de poder seguir para ni siquiera poder evaluarla de manera mínimamente coherente.
Ha habido crisis históricas profundas pero éste no va a ser ese caso ni mucho menos.
Se habla de digitalización de la vida y del cambio climático, pero nadie habla de cambiar la actitud frente al futuro. Los estados tienen una gran culpa y es que el siglo XX se ha fracturado. Las personas necesitan facilidades para poder trabajar y no sentirse atrapados en una telaraña de reglamentos cambiantes, a veces incongruentes pero seguro que de obligado cumplimiento, lo sepas o no, el estado te permite o te castiga, no te enseña, que es justo lo que hace la tecnología.
Hay que entender que estamos en una etapa de transformación que hay que ver con los ojos muy abiertos y muy lejos de etiquetas y seguridades. Favorecer una flexibilización suficiente que favorezca el desarrollo tanto desde lo personal, como desde las organizaciones que deciden.
No quiero hacer ver problemas a quien no quiere ver las oportunidades, porque este momento de transformación es como el vaso con agua por la mitad: unos lo ven medio lleno y otros lo ven medio vacío.
En realidad el agua es la misma y el vaso también lo es, por eso desde blogforex preferimos unidades de medida comparadas porque en vez de fiarnos de lo que vemos o creemos, podemos ver los centilitros de agua y salir de dudas.
Buen Trading :)