Comienza la recta final de año.
El gasto de combustible y carbono necesario para unas vacaciones lejanas ha sido un recuerdo este año y, el gasto ha sido más local. Todos nos hemos comido nuestros malos humos y eso es bastante justo asique podemos estar contentos por no esparcir mucho más allá la porquería de cada uno.
Creo que estamos progresando.
Ojalá que todo el mundo pudiera disfrutar de un descanso placentero pero ya sabemos que no es así y que además hay zonas con personas como tú, donde su perspectiva es dramática y no es sólo por Afganistán.
Son los que mandan los que saben lo que es lo correcto y quienes son los culpables y, no alimentaré una dialéctica sobre la injusticia porque son otros los que deben solucionar los problemas. Las cosas se ven y esa realidad es incontestable ni discutible.
Es que creo que el episodio reciente de Afganistán es un punto de inflexión y la deriva es todavía una incógnita a despejar. Por ahora el mundo civilizado está bastante callado por lo que el quórum de defensa de la sociedad afgana es obvia y clamorosa.
No pretendo hacer un mitín político sino poner en el centro el caso de Afganistán porque puede ser un catalizador para otros acontecimientos por venir y que necesariamente no tienen porqué ser malos.
Pero lo que urge como necesario y justo, es una manifestación clara e inequívoca en defensa de las libertades y los derechos, que ponga en el centro la defensa contra la aberración del peor talibanismo que simplemente retroalimenta un odio innecesario e injustificado.
Bolsas:
El último cuatrimestre de este año debiera ser plácido viendo la enorme recuperación de la crisis financiera de la covid.
Es muy planteable imaginarse correcciones grandes en porcentajes porque la lectura de acción del precio lo toleraría sin estrés, pero la realidad es que el empuje ahí está y es porque hay dinero que lo sostiene.
Sólo un catalizador en forma de inestabilidad política o social de gran impacto puede hacer repensar la situación a los grandes inversores sobre un paso hacia la prudencia que termine como ese castillo de naipes donde caen un montón de cartas por ser un manazas e, irte de simpático a sacar la de abajo del medio. Vamos¡, que no es lo mismo recoger ganancias que decidir salirse.
Si no hay un catalizador de impacto, toda esa cantidad de dinero que sostiene el precio de las bolsas US ¿por qué se iba a ir? y ¿a dónde?. Aquí dejo las preguntas porque una respuesta creo que no se puede dar porque la realidad es la que es.
Breve reflexión:
Las comunicaciones se han acelerado a tal velocidad que un país ya es un barrio.
El caso de Afganistán no es el único caso cruel que existe hoy en el mundo, pero sí puede ser un punto de inflexión porque todo el mundo mira para ahí y espera su resolución.
Desde blogforex somos claros: el abandono no puede ser una opción frente a esa injusticia. No es una cuestión de colonizar o adoctrinar, es que simplemente la violencia tiene una dinámica y es que o se frena o crece.
Estamos a 10 días de recordar un triste aniversario que ha sido el mayor crecimiento de la misma violencia talibán y, que nos dejó a todo el mundo atónitos y tristes.
Hay que empezar firme y serio porque los mercados y comentarios sobre la vida están de vuelta.
Mucha suerte para esta vuelta, estás invitado a participar en blogforex.