"¡Spreads desde 0.0 pips!". Es el reclamo publicitario más potente y utilizado en la industria del trading. Nos han enseñado a comparar brókers basándonos casi exclusivamente en ese número, asumiendo que el spread más bajo equivale al bróker más barato. Pero la realidad es mucho más compleja. El spread es, efectivamente, un coste fundamental, pero es solo la punta de un iceberg de costes que pueden impactar directamente en tu rentabilidad. Centrarse únicamente en el spread es como comprar un coche fijándose solo en el precio de la carrocería, sin tener en cuenta el motor, el consumo o el mantenimiento. Hoy vamos a sumergirnos para descubrir los costes reales que todo trader debe conocer. 1. El Spread: El Coste Más Visible Empecemos por lo básico. El spread es la diferencia entre el precio de compra (Ask) y el precio de venta (Bid) de un activo. Es la comisión "implícita" que el bróker gana por cada operación. Puede ser: Fijo: Siempre el mismo, sin importar la volat...